Funcionarios de la alcaldía dijeron que según sus cálculos llegaron a los alrededores del Zócalo unas 20 mil personas pero no todas contaban con pase para participar en la sesión, aunque algunas que estaban en esa situación lograron ingresar a la plaza.
Mireya Escalante, representante de Tunick en México, dijo que sus cuentas preliminares señalan que la cifra habría llegado a las 18 mil personas, y que el lunes o martes tendrán los datos exactos.
Los participantes, entre mujeres y hombres, comenzaron a desnudarse a las seis de la mañana cuando el ambiente era medianamente frío y la sesión fotográfica empezó una hora y media después y concluyó alrededor de las ocho y treinta de la mañana.
La sesión incluyó tres posiciones, de pie, acostadas y fetal; además una toma fue para captar a las mujeres únicamente. El Zócalo permaneció durante la sesión fotográfica cerrado por tierra y por aire para dar privacidad y seguridad a los nudistas que posaron para Tunick.
Las principales calles de acceso al Zócalo fueron cerradas, igual la estación de metro del lugar e inclusive se prohibió el sobrevuelo de helicópteros por ese espacio. Unos 250 policías patrullaron la zona, con la colaboración de un centenar de voluntarios, socorristas y ambulancias.
Spencer Tunick esperaba una asistencia de siete mil personas, que es la cifra máxima alcanzada en la instalación de Barcelona en 2003, por lo que de confirmarse el número de entre 18 mil y 20 mil participantes se estaría imponiendo un récord de asistencia.
En la plaza están la alcaldía de la ciudad, el Palacio Nacional y la Catedral metropolitana, y durante años ha sido el epicentro de movimientos políticos.
En el lugar, las autoridades celebran cada 15 de septiembre la Independencia de México con festejos populares y la izquierda ocupa la plaza para sus gigantescas manifestaciones, como las que han encabezado los ex candidatos presidenciales Cuauhtémoc Cárdenas y Andrés Manuel López Obrador.
Para los capitalinos los desnudos en público no son una novedad, pues un grupo campesino llamado «Los cuatrocientos pueblos», que la gente llama en broma «los cuatrocientos cueros», se quitan la ropa para exigir el reparto de tierra.
Al grito de «Si no hay solución, nos quitamos el calzón», los integrantes de este movimiento social han posado desnudos en calles céntricas para mostrar su inconformidad con las autoridades. La Catedral no fue incluida en la toma y la gigantesca bandera nacional, en el centro de la plaza, no fue izada.
El proyecto de Tunick en la capital mexicana tendrá un costo de 1,25 millones de pesos (casi 85.000 euros), y será sufragado en un 50 por ciento por dos coleccionistas, uno extranjero y otro nacional, y el resto por patrocinadores e instituciones mexicanas.
La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) fue una de las primeras que creyó en su proyecto y montará en septiembre próximo una muestra con las fotografías del domingo.