La performance partió del Palacio Legislativo y llegó a la Torre Ejecutiva, con el objetivo de interpelar sobre este tema tanto a los legisladores, como al Presidente de la República que se elegirán en los comicios del día 25.
La marcha finalizó en la Plaza Cagancha, un lugar considerado emblemático en la lucha por los derechos, explicó Mauricio de los Santos, responsable de la Campaña por los Derechos Sexuales y Reproductivos (iniciativa de Mujer y Salud) en la que se enmarcó esta performance.
Las mujeres desfilaron con el rostro y el torso maquillados, con una flor elegida como distintivo de la campaña y llamaron a quienes circulaban por la zona a reflexionar sobre su demanda.
«Tus derechos sexuales y reproductivos valen», se llama la campaña desplegada en esta oportunidad, que dejó perplejos a muchos montevideanos. Dio lugar a que abundaran las tomas fotográficas con los aparatos telefónicos, pero también a la reflexión y al debate.
Antes de esta manifestación se había llevado a cabo una campaña en reclamo por la despenalización del aborto, también desarrollada en la Plaza Cagancha y la presentación de la Agenda de las Mujeres, que se llevó a cabo en el Cabildo de Montevideo.
Los organizadores del evento consideran que la discusión sobre los derechos sexuales y reproductivos está ausente de la campaña, dijo De los Santos a LA REPUBLICA, quien reclamó que «no se habla de la despenalización del aborto, a pesar de que en nuestro país se practica uno cada 20 minutos en condiciones clandestinas».
Lamentó además que «ningún partido haga propuestas para revertir esta situación. Pero además, tampoco se discuten otros temas de gran importancia, como la prevención del VIH, la anticoncepción o la diversidad sexual».
La campaña continuará con otras actividades, comunicaron los organizadores de la marcha de ayer, que recuerdan que en Uruguay las encuestas indican que más del 50% de la población considera que la despenalización del aborto debería ser un tema de campaña.
El pasado 28 de septiembre, fecha marcada como Día Internacional de la Despenalización del Aborto, se realizó ya una manifestación similar, aunque si bien estaba previsto desfilar con los torsos desnundos y pintados, la demostración debió postergarse como consecuencia de la baja temperatura.
En esa oportunidad se leyó una proclama que en lo sustancial sostenía que «la realidad de la práctica del aborto no ha cambiado y menos aún ha dejado de existir porque nada ha mediado seriamente para que cambiara. Por lo tanto, aunque el sistema político se sentiría ‘aliviado’ si el problema desaparece por arte de magia o ‘gracia divina’, el ‘milagro’ no va a suceder».
«Cada 20 minutos se sigue produciendo un aborto clandestino en el país. La ciudadanía, que debe elegir un nuevo gobierno y un nuevo Parlamento este próximo mes de octubre, quiere saber qué soluciones se ofrecen ante esta realidad. Quiere saber qué proponen los/as candidatos/as políticos/as».