Si Virginia Woolf pudiera regresar a la tierra para analizar cuál ha sido la evolución de la mujer en la sociedad, celebraría el que muchas disfrutan ya de “una habitación propia”. Pero es muy posible que pronto constatara que no es suficiente. Para cambiar el curso de la historia es necesaria la fuerza de la comunidad, y si una mujer decide continuar su camino en solitario, suele pagar un coste emocional muy alto. Por eso, en los últimos años el arma más poderosa del feminismo está siendo la sororidad. Cada vez hay más iniciativas que buscan crear, a menudo en espacios exclusivos para mujeres, una atmósfera de confianza y seguridad donde puedan permitirse sentirse vulnerables. Aunque los hombres son cruciales a la hora de encontrar soluciones para conseguir la igualdad, tras 5.000 años de patriarcado, en estos espacios ellas ejercen su derecho a expresarse, ser escuchadas y sentirse cómodas.
En Nueva York, el último ejemplo es The Füde Experience, una iniciativa artística que consiste en eventosque giran en torno a una actividad —una cena, taller de escultura, meditaciones— con el requisito de que hay que estar completamente desnudos. Cuestan en torno a 88 dólares (79 euros) y para entrar se necesita cumplimentar un cuestionario, y según las respuestas uno es aceptado. La idea fue de la modelo estadounidense de tallas grandes Charlie Ann Max, de 29 años, que empezó a organizarlos en Los Ángeles y desde hace poco prepara uno al mes en Nueva York (tiene planes de traerlos a Madrid y Barcelona en agosto). Los actos dan cabida a 36 personas, aunque según cuenta Max a EL PAÍS, reciben miles de solicitudes. Las edades de los participantes oscilan entre los 20 y los 55 años.
Fuente: https://elpais.com/ideas/2023-05-08/cenar-desnuda-para-empoderarse-los-eventos-neoyorquinos-que-quieren-derribar-nuestros-prejuicios.html?fbclid=IwAR22-rN3Q5haFRVCJlNtE36_fUL1EM2VxkTha8X3aI-eFbUJsLJivABjNVw